Hábitos alimentarios en escolares y adolescentes de la comarca de l'alacantí

  1. RIZO BAEZA, M. MERCEDES
Dirigida por:
  1. Ernesto Cortés Castell Director

Universidad de defensa: Universidad Miguel Hernández de Elche

Fecha de defensa: 15 de diciembre de 2003

Tribunal:
  1. Manuel Moya Benavent Presidente
  2. María José Aguilar Cordero Secretario/a
  3. José Siles González Vocal
  4. Manuel Luis Cibanal Juan Vocal
  5. Carmen Isabel Gómez García Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 107080 DIALNET

Resumen

Objetivo comprobar si existen diferencias en la alimentación y el estado nutricional de los escolares y adolescentes dependiendo de su entorno urbano, el cual está a su vez condicionado por la situación social, económica y cultural. Para ello se han analizado tanto los datos cuantitativos como cualitativos de los diferentes alimentos que ingieren los niños durante siete días consecutivos y aquellos parámetros cualitativos que den idea sobre los rituales culturales en el acto de comer y que se marcan desde la infancia, durante la socialización. Resultados se ha diseñado una encuesta que permite evaluar hábitos nutricionales por ellos mismos y elimina posibles sesgos del encuestador. Se ha observado un sobrepeso (imc mayor 85%) en 34,9% en escolares, y 26% en adolescentes. En el entorno social más deprimido está el mayor % de bajos pesos 11,9%. Las horas de tv que se ven son mayor 2h/día en todos los grupos, siendo mayor en el del barrio más deprimido, al igual que verla durante las comidas (60-65%). Las comidas se realizan con los padres excepto el desayuno y merienda que lo hacen solos un 76,4%. La mayor participación en la elaboración de comidas por parte de los chicos y ambos padres se da en el barrio de mayor estatus y a la inversa. El mayor número de comidas diarias y en el comedor escolar se da en los chicos del barrio de mayor estatus, siendo además en estos comedores los menús más equilibrados. Con relación a alimentos concretos se observa una baja ingesta general de cereales, hortalizas, frutas y verduras, que es más acuasada en el barrio más deprimido, sobre todo en cereales de desayuno. En el grupo de alimentos proteicos, es la carne la preferida, siendo dobre su consumo que el pescado, los huevos no llegan en general a los 2/semana y las legumbres sólo son consumidas adecuadamente en el barrio socio-económico más elevado. Con los lácteos ocurre una situación semejante.