Análisis de la comunicación interlingüística establecida en el Sistema de Acogida de Protección Internacional (SAPI) y del impacto emocional experimentado por las personas que intervienen como intérpretes en este contexto

  1. Sánchez-Pedreño Sánchez, Alba
Dirigida por:
  1. Ana Isabel Foulquié Rubio Directora
  2. Ana María Rojo López Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Murcia

Fecha de defensa: 07 de junio de 1924

Tribunal:
  1. Juan Miguel Ortega Herráez Presidente
  2. Marina Ramos Caro Secretario/a
  3. Maribel del Pozo Triviño Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

La importancia de garantizar el acceso de las personas en situación de desplazamiento forzado a servicios de interpretación gratuitos y de calidad ha sido señalada por diversas investigaciones (Handi, 2010; Las Heras Navarro, 2012; León Pinilla, 2018). Del mismo modo, la asistencia lingüística en el Sistema de Acogida de Protección Internacional (SAPI) resulta fundamental para lograr un adecuado desarrollo de los itinerarios de preparación para la autonomía de las beneficiarias (MISSM, 2021). Además, debido a las particularidades de la interpretación en contextos de Protección Internacional (ICPI), las personas que facilitan la comunicación pueden experimentar impacto emocional o psicológico y, como consecuencia, su trabajo puede verse dificultado (Holmgren et al., 2003; Lai et al., 2015; Roberts, 2015; Shakespeare, 2012; UNHCR, 2017; Valero Garcés, 2015; Williams, 2004). En consonancia con la literatura revisada, nuestra investigación parte de tres objetivos generales: (1) analizar la comunicación interlingüística establecida en las entidades participantes y recabar propuestas de mejora de la asistencia lingüística prestada a las beneficiarias alófonas; (2) explorar el impacto emocional experimentado por las intérpretes y las estrategias que utilizan para gestionarlo; y (3) recoger propuestas que faciliten dicha gestión. Para alcanzar estos objetivos, se diseñó un estudio de naturaleza mixta. Los cuestionarios en línea distribuidos y las entrevistas en profundidad realizadas han permitido recabar datos procedentes del 50 % de las entidades encargadas de gestionar los dispositivos de acogida en el marco del SAPI y de un total de 107 personas con diversos perfiles profesionales (17 coordinadoras, 65 proveedoras de servicios y 25 intérpretes). En primer lugar, los resultados obtenidos indican que la comunicación interlingüística en las entidades participantes se establece con mayor frecuencia de forma directa por parte de las proveedoras de servicios (en español simplificado o en lenguas francas) o mediante la intervención de intérpretes ad hoc, mientras que la atención en las lenguas maternas de las usuarias o a través de intérpretes profesionales es poco común. Además, casi la mitad de las personas encuestadas colaboran en entidades que carecen de servicios adecuados para satisfacer las necesidades comunicativas. En concreto, se observan problemas relacionados con la cobertura de las lenguas maternas de las usuarias alófonas, con el número de intérpretes, con su disponibilidad horaria y en situaciones de urgencia, y con su formación y experiencia. En segundo lugar, el análisis del impacto emocional derivado de la interpretación en el SAPI revela que las características de este contexto, las circunstancias personales de las intérpretes y sus condiciones laborales les ocasionan dificultades y consecuencias emocionales y físicas de carácter negativo. No obstante, esta labor también se asocia a emociones positivas y la mayoría de las participantes consideran que a largo plazo les aporta más beneficios que efectos negativos. Por otro lado, aunque un elevado porcentaje cuenta con formación en diferentes técnicas de gestión del impacto emocional, suelen acceder a ella de forma autodidacta. Asimismo, ante la falta de apoyo institucional, recurren a estrategias y medidas que se aplican con mayor frecuencia en el ámbito personal. De hecho, el 95 % de las intérpretes afirmaron que necesitan adquirir formación y herramientas para mejorar la gestión del impacto emocional percibido. Por tanto, en línea con las propuestas de las participantes, las conclusiones que se desprenden de nuestra investigación confirman la importancia y la urgencia de promover la profesionalización de los servicios lingüísticos y de mejorar las condiciones laborales ofrecidas a las personas que intervienen como intérpretes en el SAPI, de ampliar la oferta formativa institucional y académica relacionada con la gestión emocional y con la ICPI, y de fomentar la aplicación de medidas de gestión del impacto emocional (v.g., sesiones de briefing y debriefing, apoyo grupal o terapia psicológica, entre otras).