Las proporciones múltiples del conocimientoMetodología de la creación causal de conocimiento basada en axiomática observacional

  1. García Chamizo, Juan Manuel
Dirixida por:
  1. Francisco Javier Ferrández Pastor Director
  2. Antonio Soriano Payá Co-director

Universidade de defensa: Universitat d'Alacant / Universidad de Alicante

Fecha de defensa: 24 de novembro de 2022

Departamento:
  1. TECNOLOGIA INFORMATICA Y COMPUTACION

Tipo: Tese

Resumo

La motivación de este libro es arrojar luz sobre los procesos de creación del conocimiento con el ánimo de intervenir para controlarlos. Hay razones para colegir que existe relación entre la calidad del conocimiento y el mecanismo de su creación ―ya se empeñaba Sócrates en hacer ver lo nefasto de los prejuicios―. Por eso es pertinente indagar en la génesis del conocimiento, tanto en la naturaleza de sus ingredientes como en las características de las acciones que devienen en su obtención. Asumimos que crear conocimiento es resolver problemas y proponemos el paradigma "divide et vinces" como estrategia general para resolver. De ahí, la búsqueda de criterio para descomponer el problema en subproblemas que tengan entre ellos la mayor independencia que seamos capaces de conseguir, idealmente, descomponer en subproblemas que sean disjuntos entre sí. El criterio de descomposición es clasificar las características del problema, lo cual siempre podrá hacerse con independencia de la naturaleza del mismo. Esto es, podrá convertirse en receta única para crear conocimiento, ya sea en la versión genérica de resolver problemas científicos, en la técnica de diseñar ingenios, en la humanística de establecer conceptos, en la sociológica de regular las relaciones e incluso conocimiento fantástico, ya sea a su vez, artístico ―surgido de la inspiración intuitiva― o revelado, e incluso instintivo. Hallada esa clasificación estricta del conocimiento, cualquier objeto gnoseológico podemos concebirlo como una composición de objetos gnoseológicos elementales ―canónicos― pertenecientes a cada una de las clases. La solución ―el conocimiento creado― es la composición de las soluciones a los subproblemas. Descompuesto el problema en subproblemas, el análisis de la precedencia entre estos proporciona el criterio para establecer el procedimiento de su resolución, es decir, el método para crear el conocimiento. A su vez, cada subproblema puede descomponerse en nuevos subproblemas más sencillos. El método formal causal consta de cinco etapas que son universales, es decir, independientes de problema a resolver: Etapa 1. Descomposición procedimental del problema mediante clasificación basada en la creatividad de las acciones y su ordenación causal. Esta etapa optimiza la coherencia causal de la solución en términos de su finalidad ―obtiene el resultado objetivado a partir de la conjetura―. La secuencia resultante es: RESOLUCIÓN: Análisis → Síntesis → Verificación. Etapa 2. Descomposición del problema analítico mediante clasificación basada en la observacionalidad de las decisiones de resolución y su ordenación por credibilidad. Esta etapa optimiza la credibilidad de la solución para satisfacer los objetivos. La secuencia resultante es: ANÁLISIS: Formal → Factual → Inspirado → Inmanente. Etapa 3. Descomposición del problema factual mediante clasificación basada en el alcance de las decisiones empíricas de resolución y su ordenación por la potencia que dichas decisiones tienen sobre la estructura de la solución1. Resulta, pues, un método orientado a modelo para resolver el problema empírico que tiene máxima potencia resolutoria. La secuencia resultante es: FACTUAL: Modelo → Instrumental → Contextual. Etapa 4. Descomposición del problema instrumental mediante clasificación basada en la naturaleza de las decisiones de resolución y su ordenación inclusiva. El método, que consiste en una estrategia de arriba hacia abajo, produce una solución orientada a la arquitectura. La secuencia resultante es: INSTRUMENTAL: Arquitectura → Estructura → Tecnología. Etapa 5. Descomposición del problema contextual mediante clasificación basada en la sistematización de las decisiones de resolución y su ordenación por la demora que admiten las decisiones. Resulta la siguiente secuencia de los subproblemas: CONTEXTUAL: Selección → Planificación → Contingencias. El paradigma "clasificar las entidades y ordenar las acciones" proporciona un método universal de resolución de problemas con estrategia "divide et vinces" de arriba hacia abajo, orientado a modelo y a la arquitectura, que tiene máxima potencia resolutoria y optimiza la credibilidad de la coherencia causal para satisfacer los objetivos. El método completo consiste en la siguiente secuencia: Formal → Modelo → Arquitectura → Estructura → Tecnología → Selección → Planificación → Contingencias → Inspirado → Inmanente → Síntesis → Verificación. Las decisiones de resolución que componen el método formal causal son las respuestas ordenadas a todas las preguntas esclarecedoras del enunciado del problema: La cuestión motivadora: "por qué" el problema. La cuestión modelar: "qué" es el problema. Las cuestiones instrumentales: "para qué" es la solución, "cómo" y "con qué" se hace. La cuestiones contextuales ―todas las demás preguntas―: "cuándo", "cuánto", "quién",... Porque lo es esencialmente, en términos mnemónicos, el método causal es una formalización del método socrático que expresa la sentencia "solo sé que no sé nada". Es decir, resolver en ausencia de concepciones previas para garantizar que el enunciado del problema es la única causa de la solución. La relación entre el método socrático empírico y el método formal causal es la siguiente: El subproblema socrático de la ironía corresponde a la especificación funcional que proporciona el método formal causal. Consiste en la secuencia de respuestas a las preguntas "por qué", "qué" y "para qué". Su significado es el de análisis del problema bajo la percepción de un observador externo a la solución. El observador puede percibir a la solución solamente mediante interacciones fenomenológicas entre ambos, es decir, mediante la funcionalidad de la solución ―coloquialmente, concepción de "caja negra"―. El subproblema socrático de la mayéutica corresponde a la especificación estructural que proporciona el método formal causal. Consiste en la secuencia de respuestas a las preguntas "cómo" y "con qué". Su significado es el de análisis del problema bajo la percepción de un observador inmerso en la solución. El observador puede percibir a la solución interaccionando con las partes de esa, es decir, mediante la capacidad operativa de la solución ―estrictamente, concepción de "arquitectura"―. Como corolarios, tenemos los siguientes: La secuencia analítica de resolución que hemos obtenido aborda primero la caracterización del problema desde el punto de vista externo ―"por qué", "qué" y "para qué"―, seguidamente, acomete la obtención arquitectural de la solución desde el punto de vista interno ―"cómo y "con que´"― y, finalmente, aborda el contexto operacional del nivel de saber hacer la solución. Al no tener relación con característica concreta alguna, el método es universal, esto es, proporciona solución a cualquier problema. La especificación del problema adquiere el formato de una expresión lógica compuesta por la conjunción del modelo y los objetivos y, por lo tanto, el enunciado es una expresión aritmético-lógica. Es decir, el método proporciona una especificación funcional del problema. La causalidad de la secuencia de resolución hace posible la verificación progresiva del proceso de resolución: verificación de objetivos, simulación estructural, simulación local de cada módulo y replanteo. La formalidad del método proporciona un camino hacia la resolución automática de problemas. Hemos llamado Mayéutica a nuestro prototipo básico de asistente digital en homenaje a Sócrates, el maestro de los maestros helenos que sentó las bases de la causalidad. Surge una definición para "arquitectura" de una solución: la capacidad funcional de la solución. La estructura del libro consiste en tres bloques, el primero de los cuales contiene el cuerpo de toda la investigación en seis capítulos. Está escrita en lenguaje natural y acompañada de figuras explicativas porque la finalidad es que esta parte puedan leerla los expertos de cualquier campo del saber, tanto los familiarizados con el rigor del conocimiento causal ―formal o factual―, como los que profesan las disciplinas sociales y del comportamiento humano, como los que se dedican a la creación artística o los partidarios del conocimiento revelado. El segundo bloque es para que los que prefieren el rigor matemático puedan cerciorarse de la solvencia formal que soporta al método causal. Consta de catorce anexos dedicados a proponer la axiomática observacional del conocimiento que subyace al método formal causal y a las demostraciones algebraicas de la existencia de las relaciones de equivalencia que hemos establecido para dividir el problema iterativamente y de las relaciones de orden que conforman la secuencia metodológica formal de resolución del problema. El último bloque está dedicado a la resolución de cuatro problemas, unos científico-técnicos y otros del ámbito de los estudios sociales y humanos: el diseño del prototipo del asistente digital de resolución de problemas mediante el método formal causal ―Mayéutica―, la definición del término "enseñar" la elaboración de un plan de estudios universitarios y la especificación de un parque científico. La finalidad es doble: evidenciar la universalidad del método y aportar material empírico para facilitar al lector la comprensión del método