Las cofradías en el reino de Valenciaanálisis y claves interpretativas

  1. Benítez Bolorinos, Manuel
Revue:
Anuario de estudios medievales

ISSN: 0066-5061

Année de publication: 2006

Número: 36

Pages: 553-581

Type: Article

DOI: 10.3989/AEM.2006.V36.I2.17 DIALNET GOOGLE SCHOLAR lock_openAccès ouvert editor

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Résumé

Entre los años 1329 y 1458, el reino de Valencia asistió al desarrollo de un movimiento asociativo, paralelo a otras regiones europeas, que dio lugar a la aparición de un buen número de corporaciones divididas en dos grandes grupos: cofradías religiosas y cofradías de oficio. Sus objetivos eran cubrir una serie de necesidades espirituales y benéficas, pero también servir de representación a los oficios artesanos, buscando así una mayor influencia en el mundo urbano a través de la ostentación de una serie de símbolos, que permitieron un alto grado de exhibición social.

Références bibliographiques

  • El presente trabajo es una ampliación de la memoria de licenciatura publicada por la Universidad de Alicante bajo el título Las cofradías medievales en el reino de Valencia (1329-1458), Alicante, 1998. Se trata por tanto de un artículo que permite profundizar y valorar de una forma más amplia la publicación anterior, centrada en el estudio de las ordenanzas de las cofradías en dicho periodo. Al mismo tiempo, ambos trabajos se complementan, ya que esta nueva aproximación al tema de las cofradías debe entenderse como una extensión de lo publicado anteriormente
  • P. LÓPEZ ELUM, La conquista y repoblación valenciana durante el reinado de Jaime I, Valencia, 1995, p. 49
  • Ampliando a otros territorios de la Europa cristiana, en el Languedoc pasaron de un escaso numéro de solidaridades vecinales a un desarrollo completo, de instituciones municipales bajo la fórmula del "consulat". La práctica del escrito resultó fundamental para estas nuevas "universités". M. BOURIN. Les solidarités villageoises et l'écrit: La formalisation des années 1150-1250. L'exemple languedocien, en Cofradías, gremios y solidaridades en la Europa Medieval ("Actas de la XIX Semana de Estudios Medievales de Estella. 20-24 de julio de 1992"), Estella, 1992, pp. 31-34
  • En el caso portugués el movimiento confraternal eclosionó en el siglo XII con la reforma gregoriana y con las predicaciones de dominicos y franciscanos en las ciudades. Los años de peste y guerra hicieron necesarias nuevas estrategias de ayuda y unión entre los hombres. La huida al campo llevó a la pérdida de raíces y al crecimiento de las cofradías como familias artificiales. M.H. DA CRUZ COELHO, As confrarias medievais portuguesas: espaços de solidaridades na vida e na morte, en Cofradías, gremios y solidaridades, pp. 156-157
  • P. LÓPEZ ELUM, La conquista y repoblación valenciana, p. 127
  • La presencia de otras comunidades religiosas aparecía en las ordenanzas de alguna cofradía de forma excluyente. Por ejemplo, entre los argenters (1418) los menestrales debían ser personas leales y naturales al rey, prohibiendo que se enseñara el oficio a judíos, moros o a esclavos
  • J. HINOJOSA MONTALVO, La morería de Elche en la Edad Media, Teruel, 1996, pp. 7-8
  • M.D. MEYERSON, Un reino de contradicciones: Valencia 1391-1526, "Revista d'Història Medieval" (Los mudéjares valencianos y peninsulares), 12 (Valencia, 2001-2002), pp. 16-19
  • P. LÓPEZ ELUM, La conquistay repoblación, p. 201
  • "Gracias al renacimiento del Derecho Romano , se pudo impulsar la práctica notarial y se fueron desarrollando y perfeccionando los mecanismos de control por la acción del Estado". J.A. BARRIO BARRIO, Los privilegios reales. Centralización estatal y transmisión de la política real. Los cimientos del Estado en la Edad Media. Cancillerías, notariado y privilegios reales, en La construcción del Estado en la Edad Media, Alicante, 2004, p. 123
  • P. IRADIEL, Corporaciones de oficio, acción político y sociedad civil en Valencia, en Cofradías, gremios y solidaridades, pp. 260-279
  • J. CASTILLO; L.P. MARTÍNEZ, Els gremis medievals en les fonts oficials. Els fons de la Governació del Regne de València en temps d'Alfons el Magnànim (1417-1458), Valencia, 1999, p. 18
  • P. IRADIEL, Corporaciones de oficio, pp. 264-266
  • Además, se observa una evolución en el trato de los monarcas de la Corona, dependiendo en ocasiones de la situación coyuntural. Jaime I controló el desarrollo de estas agrupaciones; mientas que Pedro III concedió privilegios a los oficios, lo que permitió su participación en el gobierno municipal. En cambio, Pedro IV limitó las libertades asociativas como represalia por la Guerra de la Unión (1347-1349). Pero el mismo rey volvió a interceder por ellos durante la guerra con Castilla (1356-1365). Así, en 1363 recuperaron la facultad de elegir a sus representantes en el consejo municipal, perdidas en 1349. J. CASTILLO y L.P. MARTÍNEZ, Els gremis medievals, p.24
  • ACA, C, reg. 479, fol. 167 r
  • La oposición al funcionamiento de las cofradías en el siglo XIII tuvo consecuencias en la siguiente etapa. La Iglesia se convirtió protectora de estas agrupaciones de laicos dedicados a la devoción y a la caridad según los estatutos redactados. Estas ordenanzas también se centraron en su propia organización interna, convirtiéndose en un factor destacado para aglutinar a la sociedad urbana. J.A. SESMA MUÑOZ, Cofradías, gremios y solidaridades en la Europa medieval, en Cofradías, gremios y solidaridades, 1992, p.28
  • Fuente: ACA. Cancillería. Elaboración propia
  • En el trabajo Las cofradías medievales en el reino de Valencia (1329-1458) aparece un cuadro más extenso con el nombre, la tasa a pagar y la fecha de la aprobación de las ordenanzas
  • Para el mundo artesano de la ciudad de Dijon en la segunda mitad del siglo XIV, E. Husson considera que "ces règlaments insistent surtout sur le respect des modes de fabrication et sur le contrôle de la qualité des produits. Les prescriptions d'ordre technique sont particulièrment nombreuses dans les ordenances sur la serrurerie". E. HUSSON, Les métiers du bâtiment à Dijon sous le "mécénat" de Philippe le Hardi, duc de Bourgogne, en Les métiers au Moyen Age. Aspects économiques et sociaux. Louvain-La-Neuve, 1994, p. 131
  • L. TRAMOYERES BLASCO, Instituciones gremiales. Su origen y organización en Valencia. Valencia, 1889, pp. 314-315
  • ACA, C, reg. 1902, fol. 233 r. Ordenanza que se repite en el año 1417
  • J.A. SESMA MUÑOZ, Cofradías, gremios y solidaridades, p.24
  • "Dans la Provence médiévale l'exercice du métier, l'ouverture d'un atelier ou d'une boutique sont libres et non soumis à des conditions restrictives. La réglamentation et le contrôle du travail relèvent de l'autorité communale et non d'une organisation corporative du métier". N. COULET, Les confréries de métier à Aix au Bas Moyen Âge, en Les metiers au Moyen Âge, p.55
  • A. COLLANTES DE TERÁN, Solidaridades laborales en Castilla, en Cofradías, gremios y solidaridades, p. 115
  • A. RIERA I MELIS, La aparición de las corporaciones de oficio en Cataluña (1200-1350), en Cofradías, gremios y solidaridades, pp. 315-316
  • Los términos utilizados por las cofradías valencianas para designar a sus miembros eran pròceres, espanyats, personas miserables, prohombres honrats o bons homes, incluso quels confrares sien preueres o en sacres ordes constiuits. En Andalucía [J. SÁNCHEZ HERRERO, Reglas de hermandades y cofradías andaluzas. Siglos XIV, XV y XVI. Universidad de Huelva, 2002, pp.35-36] las cofradías más antiguas eran las hospitalarias (1336), le siguieron las cofradías de santos (1353). A continuación aparecieron las de Santa María y desde mediados del siglo XV (1432) las cofradías de la Santísima Trinidad, que se fundaron también durante el siglo XVI. Después aparecieron las que reunían a cofrades de un mismo oficio (1450)
  • "La distintion entre confrérie pieuse et confrérie professionelle n'est pas toujours clairament indiquée. Le première se constitue généralment avant la seconde et les règlments mettan autant l'accent sur les messes anniversaires, l'organisation des fêtes, la répartition des secours, les services funéraires que sur les conditions d'emploi et les aspects techniques". J.-P. LEGUAY, Les métiers de l'artisanat dans les villes du duché de Bretagne aux XIV e et XVe siècles, en Les métiers au Moyen Âge, p. 168
  • J. CASTILLO y L.P. MARTÍNEZ, Els gremis medievals en les fonts, p.20
  • J. HINOJOSA MONTALVO, Los contrastes del siglo XIV (1327-1410), "Nuestra Historia", III (Valencia, 1980), p. 153
  • J.-L. MARTÍN, Hermandades y ligas de clérigos en los reinos hispánicos, en Cofradías, gremios y solidaridades, pp. 138-140
  • A. COLLANTES DE TERÁN, Solidaridades laborales, p. 115
  • E. FERNÁNDEZ DE PAZ, Discusiones terminológicas sobre hermandad y cofradía, en Gremios, hermandades y cofradías ("Actas de los VII encuentros de historia y arqueología" II). San Fernando, 1991, pp. 161-164
  • En Aragón, el asociacionismo gremial era la única manera de acceder al gobierno local, mientras que el matrimonio se convertía en el núcleo del taller artesano, en la unidad de producción básica y en un medio de promoción social. De ahí que la Iglesia quisiera intervenir cada vez más en su regulación. El taller familiar era el centro de la producción artesana y una "micro sociedad" donde aparecían representadas situaciones sociales dispares: asalariados, esclavos, sirvientes y aprendices. D. GONZÁLEZ SEGURA, El mundo de los artesanos medievales en Aragón a propósito de un proceso contra el pelaire Miguel Florín (1488), "Actas del II Simposio de jóvenes medievalistas". Lorca, 2004, p.69
  • La primera solidaridad en la sociedad medieval era el linaje, restringido a las familias con poder, que mantenían un orden interno muy rígido, construyendo clientelas y creando lazos artificiales con personas ajenas al propio clan, es decir, solidaridades verticales. Otras solidaridades eran las corporaciones de oficio, las convivencias de los estudiantes universitarios, las comunidades rurales y las asociaciones coyunturales de maleantes. Pero dentro de ellas también podían observarse relaciones de insolidaridad. En las las comunidades rurales, el marco lógico era la parroquia, el concejo o la familia, dedicadas a la ayuda en los trabajos agrícolas, la asistencia en los acontecimientos de la vida (matrimonios, nacimientos, fiestas, etc.) y al socorro mutuo en las desgracias (muertes, pérdidas de cosechas, muerte de los animales, etc.) J.A. SESMA MUÑOZ, Cofradías, gremios y solidaridades, p. 29
  • En cada núcleo urbano, el aumento de artesanos que se agrupan para convivir muestra que en el mundo medieval nadie se planteaba la posibilidad de vivir solo. Ibídem, pp.20-21
  • "Les antagonismes entre riches et pauvres appartenant à une même, corporation étaient devenus irréconciliebles. Au-dessus de la majorité des maîtres artisans s' était établi un petit gruope de patrons puissants, des artisans-marchands, dess entrepreneurs; en bas, des artisans pauvres, des hommes et des femmes. Plusieurs corporations étaient structurées à la manière des clientèles, avec des patrons à leur tête qui fournissaient les matières premières aux moins aisés et prêtaient de l'argent à ceux quien avaient besoin" K. SIMON-MUSCHEID, Les documents normatifs et les "vécus d'aprés les inventaires. Le cas de Bâle et de la région du Haut-Rhin, en Les métiers au Moyen Âge, p.320
  • ACA, C, reg. 1894, fol. 19 r
  • La vecindad era el requisito necesario para formar parte de la comunidad local en las villas y ciudades. Era necesario tener la condición jurídica de vecino para disfrutar del derecho urbano (franquicias y privilegios), y participar en la administración de los intereses comunitarios a través del concejo. La integración en la comunidad vecinal nivelaba jurídicamente a sus habitantes y obligaba a prestarse ayuda contra los extraños al grupo. J.I. RUIZ DE LA PEÑA SOLAR , Las solidaridades vecinales en la Corona de Castilla (Siglos XII-XV), en Cofradías, gremios y solidaridades, pp.64-67
  • En 1378, la sublevación de los artesanos florentinos es una muestra de la toma de conciencia de su condición social hasta llegar a reclamar la participación en el gobierno de la ciudad. CG. CHERUBINI, I lavoratori fiorentini della lana fra solidarieta di mestiere e primo capitalismo, en Cofradías, gremios y solidaridades, p. 108
  • En Castilla, la relación entre las, autoridades reaies y las agrupaciones solidarias bascularon entre varios límites: el poder público indujo una conciencia de grupo imponiendo comportamientos grupales, pero también tomó medidas para frenar estos comportamientos solidarios, limitando el monopolio económico y laboral. También influyó la existencia o no de una conciencia de grupo dentro de los oficios (ya que algunos artesanos se mostrarían más emprendedores que otros). Al no canalizarse la solidaridad por medio de los oficios, la existencia de las cofradías tendrían un mayor sentido. A. COLLANTES DE TERÁN. Solidaridades laborales, pp. 116-122
  • Fueron varios los factores que influyeron en la aparición de una nueva sensibilidad espiritual; la difusión de una religiosidad que rompía con la anterior, demasiado clerical; la imposición de una sociedad cada vez más del individualista; el sentimiento de culpa; las predicaciones regulares o extraordinarias (como las de San Vicente Ferrer) que se unían a los sermones, al teatro, religioso, al modelo de la vida de los santos, o el deseo de mayores conocimientos teológicos por parte de los seglares. Todo ello llevó a una crítica sobre la función sacerdotal, sus privilegios, sus bienes materiales, su jerarquización, apareciendo una teología favorable al laico en la reforma del XVI. Surgieron nuevas devociones (al Cristo dolorido o al niño Jesús y a la virgen). Pero lo más importante es que ante esta nueva sensibilidad, la piedad oficial no satisfizo del todo a los espíritus más sensibles, de ahí la aparición de movimientos heréticos desde el siglo XIII. A. FRANCO SILVA, La religiosidad popular en la baja Edad Media, en Gremios, hermandades y cofradías ("Actas de los VII encuentros de historia y arqueología", I, San Fernando, 1991, pp. 13-17
  • J.I. RUIZ DE LA PEÑA, Las solidaridades vecinales en la Corona de Castilla, pp. 54-58
  • Existía una gran variedad: en alguna cofradía se prohibía llevar espardeñas, calzas o çarboix, un gorro que portaban los musulmanes ricos y algunos cristianos. En otras era obligatorio el drap de la cofradía, mantos, gramalles o capirons (cuyo color cambiaba según la hermandad)
  • En algunas cofradías, sus miembros debían acudir primero a la casa del difunto y acompañarlo a la sepultura. En otras, debían acompañarlo a la iglesia para oír misa y regresar después a la casa de donde hubiera partido la comitiva. Los mayorales podían elegir a diez hombres para llevar el cuerpo hasta la iglesia y el cementerio. La presencia de frailes en los sepelios permitía solemnizar el acto y darle el sentido religioso que las cofradías pretendían
  • Lo que Jean Delumeau definió como "una ruptura iuhumana"
  • J. LE GOFF, El nacimiento del Purgatorio. Madrid, 1985, pp. 9-17
  • La garantía de la sepultura era un privilegio derivado del ejercicio de la profesión, siguiendo el ejemplo de la familia en la aristocracia. R. GRECI, Economía, religiosita, politica. Le solodarietà delle corporazioni medievali nell'Italia del Nord, en Cofradías, gremios y solidaridades, p.86
  • M. LOP CATALÀ, La predicación y las cofradías valencianas, siglos XIV-XV, "Boletín de la Sociedad Castellonense de Cultura", LVIII/1 (1982), p.52
  • Al estudiar las cofradías de Barcelona, Bonnassie consideraba que eran un cuerpo de maestros de oficios, donde los oficiales eran miembros secundarios. P. BONNASSIE, La organización del trabajo, en Barcelona a fines del siglo XV, Barcelona, 1975, p. 36. En las ordenanzas de las cofradías valencianas no se ven reflejadas claramente estas diferencias entre maestros y oficiales, aunque sí aparecen dobles cofradías para un mismo oficio dependiendo de si se forman a partir de maestros o de oficiales: maestres d'obra de vila, maestres peraires y maestres texidors, macips peraires, macips texidors, macips del pes real, joves cabeteis i custiners y lauradors jovers
  • En Italia, de la unión entre las asociaciones de menestrales y las, autoridades públicas a la hora de crear estas agrupaciones derivó en una fuerte orientación política. [GRECI, R. Economia, religiosità, politica, p.80.]
  • En cambio, en Castilla, las cofradías de oficio no servían gara promover a ninguno de sus integrantes a cargos de alcalde o regidor. El acceso de los hombres de negocio a los concejos era debido a sus "carreras individuales". [J.M. MONSALVO, Los artesanos y la política en la Castillo Medieval. Hipótesis acerca de la ausencia de las corporaciones de oficio de las instituciones de gobierno urbano, en Historia social y ciencias sociales ("Actas del IV Congreso de Historia Social de España", Lleida, 2000), pp. 296-298.]
  • En el País Vasco, las disputas meron constantes entre las cofradías y los concejos por temas diversos: el control de las decisiones económicas y fiscales de los gobiernos locales, o la desconfianza de los concejos ante estas agrupaciones [E. GARCÍA FERNÁNDEZ, Las cofradías de oficios en el País Vasco durante la Edsad Media (1350-1550), "Studia Historica. Historia Medieval", 15 (Salamanca, 1997), p.32.]
  • Mientras tanto, en Lieja "les métiers profitent de la déstabilisation qui frappe le pouvoir ecclésiastique et l'elite socio-économique pour revindiquer une part de l'autorité communale" [XHAYET, Le rôle politique des métiers liégeois à la fin du moyen âge, en Les métiers au Moyen Âge, 1994, p.362]
  • Lo mismo se observa en Castilla. J.A. SESMA MUÑOZ, Cofradias, gremios y solidaridades, p. 25-26
  • H. ZAREMSKA, Les confréries religieuses à Cracovie entre la XIVème et le XVIème siècle, en Cofradías, gremios y solidaridades, pp. 191-200
  • R. NARBONA VIZCAÍNO, Cortejos ceremoniales, funciones religiosas y simbolismos políticos en ls ciudades medievales, en Los cimientos del Estado en la Edad Media, p.234
  • "La valeur religieuse accordée à la figure du pauvre, vue à travers les courants de la vie apostolique et évangé uque, ultérieurement ravivés par les ordres mendiants, notamment grâce à François d'Assise". C. VINCENT, Les confréries médiévales dans le Royaume de France. XIIIe-XVe siècle, Paris, 1994, p.80
  • "Dans la société médiévale l'apparence extérieure ne doit rien au hasard. Elle obéit à un code au titre duquel chaque élément revêt une signification précise: ainsi, la queue du cheval de valet est nouée alors que flote librement celle du chevel de maître, les coiffures distinguent les degrés de dignité dans l'aristocratie, les couleurs du vêtement sont signes d'allégeance a telle famille ou tel parti politique". Ibídem p. 14
  • Así sucedía en la cofradía de los ballesters de la ploma (1393). En las cofradías de Santa Trinidad y San Miguel de Xàtiva (1401) se enumeraban cruces, canelobres de oro, plata u otro metal. En las ordenanzas de San Antonio de Valencia (1393) se nombraban imágenes, coronas, pedits, pareges, perlas, correges y arneses. En al cofradía de ligadors de bales (1415) podían tener una imagen de la virgen con la representación del nacimiento de Jesucristo y la Adoración de los Reyes en plata y oro para llevarla sobre los cuerpos de los cofrades que murieran. En la cofradia de juponers i vanovers (1418) y en la de ligadors de balas (1404) reglamentaban la posibilidad de hacer cruces de plata con ornamentos de piedras o perlas
  • Para los argenters (1392), los draps podían llevar la señal del oficio y la imagen de San Eloy. En la de juponers i vanovers (1418) podían llevar la imagen de San Amador con algunas letras
  • Se hablaba en varias cofradías de paños de oro, de vellut, draps richs, paños de seda con imágenes de plata o de oro, de lana de lino o de cualquier otro tipo