Competencias digitales de los estudiantes de educaciónestudio descriptivo sobre bases formativas y eficacia en el empleo de las tic

Resumen

En la actual Sociedad de la Información y del Conocimiento tiene una gran relevancia la formación en competencia tecnológica para comunicarnos culturalmente, acceder al mercado laboral y la sostenibilidad de una formación actualizada y permanente. En este sentido, la competencia digital es una de las competencias clave del ciudadano moderno (Silva, Usart y Lázaro, 2019) y es clave para lograr la ciudadanía digital (Aristizabal y Cruz, 2018). El objetivo de esta investigación es describir las competencias básicas digitales de los estudiantes universitarios de las titulaciones de Grado de Educación Social y de Doble Grado en Trabajo Social y Educación Social de la Universidad Pablo de Olavide correspondiente a los cursos académicos 2016-17; 2017-18 y 2018- 2019. Para ello se utiliza un diseño de investigación no experimental, de tipo exploratorio basado en el uso del cuestionario como instrumento de recogida de información. Los datos fueron recogidos a través de un Cuestionario: “Competencias básicas digitales 2.0 de estudiantes universitarios” COBADI® (Marca registrada en la Oficina de Patentes y Marcas (España): 2970648). Este fue creado y testado por investigadores del grupo de investigación EDUINNOVAGOGÍA® (HUM-971), grupo reconocido por el Plan Andaluz de Investigación, Desarrollo e Innovación y la Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación de la Universidad Pablo de Olavide. Vicerrectorado de Docencia y Convergencia Europea de dicha Universidad. Los resultados revelaron que se pudo determinar el grado de competencia del uso de las TIC para la búsqueda de tratamiento de la información del alumnado de esta institución. De igual forma, se pudo analizar qué competencias interpersonales en el uso de las TIC posee el alumnado en el contexto universitario y qué herramientas virtuales y de comunicación social son utilizadas con más frecuencia por el estudiantado universitario. Asimismo, se puede inferir de los resultados obtenidos que los estudiantes encuestados de primer curso de ambas titulaciones de la Universidad Pablo Olavide, poseen una serie de competencias digitales básicas e iniciales como son la búsqueda de información, participar en redes sociales o el uso de foros en los que realizar pequeñas incursiones, pero desconocen recursos y aplicaciones digitales más específicas tanto de búsqueda y tratamiento de la información, como de comunicación social y aprendizaje colaborativo. Emplean en mayor medida la competencia digital circunscrita, principalmente, al área de la gestión de la información y alfabetización informacional, es decir, con la búsqueda y tratamiento de la información en línea, navegación web y selección de contenidos educativos digitales en ecosistemas digitales. Por otra parte, el nivel de formación disminuye (de moderado a bajo) en competencias más complejas como la creación de recursos didácticos digitales (webquest, e-portafolio, blog, wiki, etc.), manejo de hoja de cálculo, gestión de base de datos, y diseño de presentaciones multimedia; coincidiendo también con las conclusiones obtenidas por otras investigaciones (Coronado, Cantú y Rodríguez, 2014). Por último, cabe resaltar en relación con la utilización de los servicios digitales que ofrecen la Universidad que la mayoría del alumnado universitario expresaron que dominan completamente el uso de la plataforma digital de la Universidad, pero apenas utilizan otros servicios como las redes sociales de la Universidad o el diario informativo de la Universidad La UNESCO (2015), en el marco de acción para la educación del 2030, destaca el potencial de las tecnologías digitales y la relevancia en la formación en competencias tecnológicas para el acceso al mercado laboral. De igual manera, aunque es indudable que la tecnología tiene constante presencia en nuestra vida actual, pero, en tiempos de crisis sanitaria, hoy más que nunca se han convertido en elementos cruciales e imprescindibles para el tejido social, educativo y económico de los países de todo el mundo. Quisiéramos cerrar este apartado resaltando que en estos tiempos de crisis sociosanitaria, es un hecho histórico que esta Sociedad tecnológica, también permite generar sinergias y experiencias colaborativas (Burgos-Videla, Vázquez-Cano, López-Meneses & Adaos-Orrego, 2021; Gómez Galán, 2021), nos ofrecen una oportunidad para ejecutar esfuerzos conjuntos basados en la racionalidad, la solidaridad y el humanismo, que contribuyan a mitigar las consecuencias de la COVID-19 y a preparar un mejor escenario pospandémico (Jiménez-Sánchez, 2020). En consecuencia, estimamos que las instituciones educativas no pueden permanecer ajenas a este contexto tecnológico y deben jugar un nuevo papel como propulsoras de competencias que el futuro egresado deberá manejar en su desenvolvimiento académico, personal y profesional a lo largo de la vida (Bhuasiri et al., 2012; Gozálvez et al., 2014; Amellini & De Stefani, 2015; Cabero et al. 2018; Gómez Galán, 2020; López-Meneses et al., 2020). En este sentido, la Universidad Pablo de Olavide siempre al servicio de la sociedad ha estado comprometida con el uso crítico y digitalización de la educación universitaria.