Ricardo Pigliaescritor , profesor y diarista . Una historia de la educación literaria como novela.
- FERNÁNDEZ COBO, RAQUEL
- José Manuel de Amo Sánchez Fortún Director/a
- Miguel Gallego Roca Codirector/a
Universidad de defensa: Universidad de Almería
Fecha de defensa: 06 de marzo de 2018
- Eduardo Becerra Presidente/a
- Ramón F. Llorens García Secretario
- Jorge Fornet Gil Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
La obra de Ricardo Piglia ocupa, sin lugar a dudas, un lugar indiscutido en el campo literario tanto argentino como español. La cantidad de investigaciones desarrolladas en los últimos treinta años sobre la figura del escritor en torno a su crítica sobre el canon, la relectura de los clásicos y la inclusión de escritores marginales son pruebas de ello. Sin embargo, gran parte de sus textos críticos y académicos siguen aún sin ser abordados por los estudios literarios teniendo en cuenta el contexto histórico y el ambiente intelectual que rodearon los años de formación del escritor argentino, así como su relación con la educación literaria. Recordemos que Ricardo Piglia no solo mantuvo desde los inicios de su trabajo como profesor, un interés constante por la enseñanza sino que, además, formó parte junto con David Viñas, Noé Jitrik, Beatriz Sarlo y Josefina Ludmer, del grupo de profesores que realizaron una renovación disciplinar en Argentina respecto de las carreras de Letras, vinculándose con la llamada «universidad de las catacumbas» que tuvo lugar durante la dictadura de Videla (1976-1983). También colaboró en revistas culturales argentinas prácticamente clandestinas como Literatura y Sociedad, Los Libros y Punto de Vista donde, por primera vez, se tradujeron textos de Raymond Williams y Richard Hoggart. Desde esta posición, Ricardo Piglia funda una narrativa que debate implícitamente cuáles son los conocimientos necesarios para elegir de qué modo leer los textos y, así, discutir, más allá de los materiales pedagógicos, cómo enseñar literatura o, lo que viene a ser lo mismo, cómo formar lectores. Su obra, sin duda alguna, funda una auténtica teoría de la lectura que todavía no ha sido abordada ni por los Estudios Literarios ni por la Didáctica de la Literatura. Por tanto, esta tesis pretende armar una tradición sobre el lector que articule esas bases pedagógicas con las literarias y dé respuesta a los siguientes interrogantes: ¿Cómo y desde qué lugar lee Piglia? ¿Cómo construye Piglia una serie de textos sobre el lector? ¿Qué tipo de relaciones establece Piglia entre la lectura y la vida (entre los «modos de leer» y «los modos de ser»)? A la luz de estos interrogantes, la presente investigación se dividirá en dos partes. La primera parte, formada por dos capítulos, pretende hacer un recorrido por las premisas teóricas que han pautado nuestro análisis y una reconstrucción histórica del contexto en el que se sitúa la obra del escritor argentino. En la segunda parte, abordamos las tres prácticas fundamentales de la vida de Ricardo Piglia: escritor, profesor y diarista. El tercer capítulo, «Modos de narrar: El camino de Ida y Blanco nocturno», se detiene en el análisis de las dos últimas novelas del autor señaladas en dicho título. Sostenemos la hipótesis de que una lectura de estas dos novelas en relación con el resto de su narrativa –sobre todo Respiración artificial, Prisión perpetua y Nombre falso− permiten releer toda su obra como un Bildungsroman; una sola y única gran novela sobre la educación literaria del protagonista. Asimismo, hemos realizado un recorrido breve por el estado del género policial en Argentina que explica el uso de la ficción paranoica en la narrativa de Ricardo Piglia. Un acercamiento a sus elementos esenciales –el enigma, el delirio interpretativo, el monstruo y la amenaza– nos permitirá entender el modo en que el género crea un espacio de trabajo con el lector y lo conduce de la mano, como un guía, a lo largo de su educación literaria. En el cuarto capítulo, titulado «Modos de leer: el profesor como lector», hemos tratado de indagar en los «modos de leer» que Piglia profesor ponía en práctica tanto en sus ensayos como en sus seminarios dentro del espacio localizado de la enseñanza universitaria, y la manera en que esos «modos de leer» se relacionan con las prácticas institucionales de lectura que están consagradas en lo que Dalmaroni ha llamado «el campo clásico» (2009). En el capítulo quinto, «Modos de ser: Los diarios de Emilio Renzi», nos detenemos en la manera en que Ricardo Piglia reconstruye su propia genealogía como escritor dentro de un espacio autobiográfico (Lejeune) desde el cuál volver a leer –a reinterpretar– toda su obra anterior. Finalmente, en el último capítulo expondremos las conclusiones acerca de cómo un hombre al que «solo le interesa la literatura, habla siempre con citas y vive literariamente» (CYF, 110), crea a través de la historia de su Educación literaria, su propia vida como una novela. Narrar, leer y ser se constituyen, desde esta perspectiva, como caras de una misma moneda, donde sus relaciones están determinadas por las relaciones de propiedad, es decir, por un uso personal de la literatura.