La basílica de Santa María de Elche.Análisis histórico, arquitectónico y constructivo. Estudio diagnóstico

  1. SPAIRANI BERRIO, YOLANDA
Dirigida por:
  1. Miguel Louis Cereceda Director

Universidad de defensa: Universitat d'Alacant / Universidad de Alicante

Fecha de defensa: 22 de enero de 2016

Tribunal:
  1. Víctor Echarri Iribarren Presidente
  2. Javier Benlloch Marco Secretario/a
  3. María Teresa González Muñoz Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 401273 DIALNET

Resumen

La Basílica de Santa María es el edificio histórico de mayor relevancia en la ciudad de Elche, catalogado como BIC, en él se representa el Misteri o Festa d’Elx, declarado como Patrimonio de la Humanidad. El templo actual tiene planta de cruz latina y nave central dividida en cuatro tramos con capillas laterales entre contrafuertes. Presenta una cúpula ligeramente apuntada. Las bóvedas de la nave central y transepto son de cañón con lunetos. El presbiterio con girola se cierra con una semicúpula. Hay una planta de tribunas sobre las girolas y capillas. Tras el presbiterio se situa la capilla de la Comunión de planta de cruz griega, y entre ésta y el crucero se levantan las dependencias de la sacristía, con una escalera volada de magnífica estereotomía. El edificio actual es el cuarto levantado en el mismo lugar. La primera construcción fue una mezquita que tras la conquista del Rey Jaime I en 1665 se pasó a la advocación cristiana. Posteriormente se construyó una iglesia gótica, que fue sustituida por una renacentista, y tras colapsar parcialmente ésta en 1672 se construyó la actual, cuyas obras se ejecutaron en tres fases desde 1673 hasta 1784. El edificio barroco se levantó según planos de Francisco Verde, quien fallece tras estar un año al frente de la obra, por lo que le siguen varios arquitectos en su ejecución, siendo el más significativo Juan Fauquet i Verde que estuvo 38 años dirigiendo y construyendo el edificio. Se sabe que traza unos planos, que fueron comprados a sus descendientes para continuar las obras de la Capilla de la Comunión. En 1759 Marcos Evangelio la comenzó a construir levantando los 4 primeros metros de dicha Capilla. Los únicos planos existentes están firmados por Lorenzo Chápuli y José Gonzalvez de Coniedo, siendo una incognita la autoria hasta el momento. Tras la presente investigación se sabe que Evangelio utilizó unos planos antiguos y tras comparar los planos existentes con los planos actuales de la Capilla, se llega a la conclusión que probablemente la planta original la trazó Fauquet o José Herrera y a partir de la primera cornisa es obra de José Gonzálbez de Coniedo. La Basílica ha sufrido diversos avatares en su historia, como un fortísimo sismo en 1829 y un incendio devastador en 1936, que junto a daños originados desde su construcción, implicaron traumáticas intervenciones como la sustitución de la cúpula, y cubierta a cargo de Marceliano Coquillat y posteriormente las bóvedas de la nave y crucero por Antonio Serrano Peral. En la presente investigación se han obtenido nuevos datos y detalles sobre su evolución constructiva, llegando a la conclusión de que en el templo actual existen reminiscencias del edificio renacentista, concretamente la torre y parte de la estructura de la zona de la nave. Esta hipótesis se fundamenta en el análisis de la historia, la geometría y sistemas constructivos de la Basílica. En cuanto a los materiales empleados, se han encontrado cuatro litologías diferentes en sus fábricas, la utilizada en la construcción de la Capilla de la Comunión procede de la sierra del Ferriol y es semejante a la de la Dama de Elche, cuya cantera también se ha estudiado. Las otras tres litologías corresponden, con toda probabilidad a otras canteras históricas como Salinetes. Con el reconocimiento geométrico del edificio se ha podido observar que la cúpula no es de media naranja sino apuntada, y se han cuantificado y diagnosticado las deformaciones existentes. En el futuro este templo sufrirá inexorablemente intervenciones encaminadas a conservarlo, por ello se han estudiado en profundidad las alteraciones pétreas y se han evaluado la eficacia de diferentes tratamientos consolidantes.