Análisis contrastivo y estudio de una base de datos paremiológica temática"hispano-francés-árabe". Problemas de traducción y de equivalencia

  1. ABDI YATTOU, HANANE
Dirigida por:
  1. Pedro Mogorrón Huerta Director

Universidad de defensa: Universitat d'Alacant / Universidad de Alicante

Fecha de defensa: 21 de enero de 2016

Tribunal:
  1. Salah Mejri Presidente/a
  2. Eva Lapiedra Gutiérrez Secretaria
  3. Mohamed Mounir Salah Vocal
Departamento:
  1. TRADUCCION E INTERPRETACION

Tipo: Tesis

Teseo: 401456 DIALNET lock_openRUA editor

Resumen

INTRODUCCIÓN Y DESARROLLO TEÓRICO: A través de las influencias culturales y lingüísticas del refranero, vamos a abordar un estudio paremiológico de tres lenguas: el español, el francés y el árabe elaborando un estudio contrastivo de los aspectos culturales similares y diferenciadores que ofrecen estas tres culturas, basándonos en la sabiduría popular, el “Refrán”. Sin embargo, el refrán es un enunciado breve, sentencioso e ingenioso que difunde un mensaje moralizante, estimulando a la reflexión culta y moral. Los refranes proceden de unas realidades antiguas, de otras épocas y sociedades que, hoy en día, resultan difíciles de entender para una persona de nuestra época, principalmente, si ha vivido lejos de los ámbitos rurales o campesinos, medios en los que se generaron muchos de ellos, por ejemplo: “En junio, hoz en puño”; “La mala paga, aunque sea en paja”etc. Además, muchas veces, sus enseñanzas son incorrectas, nos sirven como ejemplos los refranes siguientes: “Al dolor de cabeza, el comer le endereza”, o en los refranes que hacen referencia a la mujer, como: “A la mujer y a la mula vara dura”; “La mujer y la sartén, en la cocina están”. A pesar de esas limitaciones temporales, los refranes están en boca de la gran mayoría de los hablantes de las diferentes lenguas. Sin duda alguna, todos conocemos o hemos oído alguna vez refranes como: “Quien busca halla”; “A buen hambre, no hay pan duro”; “Abril, aguas mil”; “A buen entendedor, pocas palabras”, “A caballo regalado no le mires el diente” o “Quien madruga, Dios le ayuda”. La brevedad y la expresividad de estas oraciones son las razones principales por las que estos y otros refranes, más o menos actuales, siguen siendo usados todavía en nuestra época. Si por ejemplo, alguien se ha entremetido de manera desgraciada en una reunión y ha dado su opinión sin ser interrogado ¿cómo reaccionar ante su comportamiento para no incomodarle? Se podría, fácilmente, y con una palabra empleando el imperativo ¡Cállate!, pero, para que no se sienta inoportuno, en este caso, sería conveniente usar el refranero y aconsejarlo así: “En boca cerrada no entran moscas”. ¿Existe una expresión que exprese de manera más sencilla una idea como ésta? Circunstancias como éstas ocurren frecuentemente, tanto en relaciones personales (pareja, familia, amistad) como en ámbitos menos frecuentes (ocio, trabajo, calle). Los refranes, pues, son un gran recurso lingüístico que debido a su expresividad sirven de apoyo ineludible a todo acto de comunicación. Asimismo, hoy en día, se siguen inventando nuevos refranes, se pueden escuchar unas enunciados recientes que representan la estructura principal de los refranes, pero que, limitándose a la actualidad, toman nuevos referentes para aludir a circunstancias universales como el amor, familia, comida, trabajo, dinero,… etc., por ejemplo: “A entrenador nuevo, victoria segura”; “A lo que está de moda, todo el mundo se acomoda”; “Es mejor perder un curso en la vida, que perder la vida en un curso”…etc. Los enunciados sentenciosos siguen presentes y siguen apareciendo nuevas sentencias que recopilan el saber popular. “Como los refranes son sumas de experiencias, modos de expresarse, de reflejar normas y formas de vida. El refrán es observación que se traspasa. Las personas de todas las partes del mundo usan los refranes para transmitir su sabiduría, sus conocimientos, sus experiencias y sus sentimientos. Muchos refranes, que se originaron hace miles de años son válidos aún” (Sevilla y Cantera, 2002: 22-78). Sin embargo, los refranes están llenos de vida y cargados de indicios que reflejan el modo de vida de la gente, sus costumbres, sus tradiciones, sus creencias. De un idioma a otro se aprecian diferencias, por consiguiente, cada lengua utiliza una imagen distinta; puesto que existen refranes que mientras que representan una situación o una creencia precisa, en otra cultura simboliza otra situación o creencia diferente. Ejemplos: Martillo de plata rompe las puertas de hierro resulta que, en algunas culturas –como la española o la francesa- “el martillo” es el símbolo del poder y la fuerza, en el caso del árabe es “el alicate” المال له كلاليب من حديد . Otro ejemplo sería el siguiente: Con la mujer y el dinero, no te burles compañero, pues en la cultura española “la mujer y el dinero” son de mucha importancia, en el caso del francés son “temps et femmes” Du temps et des femmes, il ne faut pas s'en mêler, mientras que en el caso del árabe son “la casa y la mujer”, الدّار والمرا ما فيهم شركة. En el siguiente refrán El mejor amigo, un perro / Le chien est le plus fidèle ami de l'homme resulta que en ambas culturas, la española y la francesa, “el perro” simboliza la fidelidad en la amistad, mientras que en la cultura árabe خير المحادث والجليس كتاب تخلو به إن ملّك الأصحاب es “la lectura de un libro”. Sin embargo, toda frase sentenciosa de cualquier cultura del mundo tiene un matiz o carácter peculiar que lo distingue de cualquier otra sabiduría, y esto se debe a la diferencia existente entre culturas, religiones y costumbres. El problema reside, por tanto, en su detección y en encontrar la traducción adecuada por una paremia equivalente en la lengua meta, o sino, utilizar la imagen correspondiente de la lengua meta para revelar esa realidad universal a la que se refieren las paremias. Por lo tanto, si el traductor no halla la equivalencia adecuada del refrán y lo traduce palabra por palabra, puede obtener dos resultados: encontrar una equivalencia simétrica que se corresponde al cien por cien en el léxico, ejemplo: Más vale estar sólo que mal acompañado / Il vaut mieux être seul que mal acompagné / الوحدة خير من جليس السوء , o sino puede que la traducción encontrada en la lengua meta se entiende pero no resulta auténtica, ejemplo: Quien hace un buen amigo hace un buen abrigo / Qui fait un bon ami fait un bon manteau / من له صديقا جيدا له معطفا جيدا en vez de traducir Qui a un ami a une tour forte / صحبة العاقل زين الفتى . De ahí el traductor se encuentra frente el problema de elegir la equivalencia correspondiente. En esta elección el traductor debe saber a qué grupo de paremia corresponde el enunciado y también debe conocer su frecuencia de uso. Para ello, es imprescindible que el traductor posea un buen nivel cultural paremiológico pero, aún así, muchas veces, el conocimiento de la lengua es insuficiente para entender el enunciado en la propia lengua, y peor aún si se trata de una lengua extranjera. Por consiguiente, al traductor le queda como punto de apoyo los útiles de trabajo. Uno de los útiles fundamentales es el uso del diccionario que es de gran utilidad para tal tarea. Sin embargo, el mundo de las paremias es demasiado difuso para los diccionarios. El problema consiste en la carencia de estudios exhaustivos que recopilan las paremias con sus variantes e introducir información sobre su uso. En este trabajo pretendemos ofrecer a los traductores un contraste del que podrán beneficiarse estableciendo contactos entre tres realidades o culturas: el español, el francés y el árabe. Se trata pues, de una sencilla contribución avanzada, al intentar reunir bajo un mismo campo, mundos tan diferentes, que luego en la práctica, se ha demostrado que no lo son tanto. La elección de este tema, pues, se debió, a que hemos estado, desde siempre familiarizados con los refranes. Las conversaciones hogareñas y las habituales con otros familiares y amigos estaban llenas de ellos. También queremos aprovechar el fenómeno paremiológico para conocer mejor la relación entre la lengua y la cultura, a través de una selección de refranes asociados a determinados campos semánticos que son: la amistad, el dinero y la mujer. Hemos seleccionado los refranes de estos campos temáticos porque son unos de los más corrientes y frecuentes, aparecen frecuentemente en las fuentes bibliográficas consultadas y también en los recursos electrónicos (motores de búsqueda y diccionarios electrónicos), y además, porque hemos conseguido encontrar, sin dificultad, la mayoría de sus equivalencias en francés y en árabe. Estamos ante una Base de Datos (BD) paremiológica compuesta por ochocientos cincuenta refranes populares españoles acompañados por sus respectivas correspondencias en francés y en árabe que presenta un análisis sobre, como ya hemos mencionado anteriormente, la amistad, el dinero y la mujer. Todo ello debidamente enmarcado por una estructura detallada y completada por el significado de cada refrán, en castellano, francés y árabe. Nuestro estudio, como podremos ver en su desarrollo, se compone de dos partes bien diferenciadas: la primera parte trata el estudio teórico relativo a la fraseología, en general, luego, ofrece un panorama histórico y teórico, detallado del estudio paremiológico de las tres lenguas analizadas: el español, el francés y el árabe; la segunda parte está dedicada al análisis de la BD de los refranes en los tres campos semánticos estudiados: la amistad, el dinero y la mujer. Hemos diseñado nuestra tesis en cuatro capítulos, siendo el primero está la Introducción que ilustra los pasos seguidos para la elaboración de este trabajo y que constituyen el cimiento de nuestro estudio. En el Capítulo 2 hablaremos de la fraseología, en general, como ciencia que engloba a la paremiología. Trataremos de explicar qué es una Unidad Fraseológica (UF), cuáles son sus características y una breve clasificación de las mismas. Después, nos centraremos en elaborar un estudio paremiológico empezando con la clasificación de las paremias, luego nos limitaremos a realizar un análisis contrastivo de los refranes españoles, franceses y árabes, realizando un recorrido por la historia de los refranes, desde las primeras recopilaciones hasta llegar al estado actual de esta disciplina, en las tres culturas, tratando ofrecer, de forma detallada, los siguientes puntos: • Estudiar la diferencia terminológica existente entre “ refrán” y “proverbio” • ¿Qué es un refrán? • Su significación y vigencia, sus fuentes y origen • Las caracterizaciones de los refranes españoles • Las caracterizaciones de los refranes franceses • Las caracterizaciones de los refranes árabes • La clasificación de los refranes españoles • La clasificación de los refranes franceses • La clasificación de los refranes árabes Después de realizar un análisis teórico de los refranes en las tres lenguas, en la segunda parte, de nuestra tesis, que la hemos dedicado a la parte práctica del estudio, y que constituye, sin lugar a dudas, el cuerpo central de nuestra investigación que se abre a partir del Capítulo 3, donde presentamos la definición y los pasos seguidos para la elaboración del listado de los refranes seleccionados, en las tres BD: el primero recoge 850 refranes españoles, el segundo comprende 601 refranes franceses y el tercero incluye 516 refranes árabes y se describe la metodología del análisis empleado. En los refranes puede verse reflejada el modo de vida, la forma de pensar y el carácter del pueblo que los ha creado. Los refranes son un medio directo y evidente, único y rico para conocer, quizás mejor que de ningún otro modo, las costumbres y las tradiciones de la cultura que los genera. Los refranes que tratan la amistad, el dinero y la mujer permiten conocer qué tipo de estructura jerárquica se daba en las sociedades: española, francesa y árabe . La presente recopilación de refranes pretende un doble fin: dar a conocer al lector este tipo de producción popular y establecer las connotaciones, semejanzas y diferencias a nivel de la estructura social con la cultural entre las tres sociedades: la española, la francesa y el árabe. Asimismo, hemos recopilado refranes, de la misma temática, en las tres lenguas analizadas, recopilación que nos permitirá contrastar estas formas y los equivalentes en las tres lenguas y en las tres culturas. Para comprender bien el funcionamiento del método teórico explicaremos la estructura y los criterios que se han seguido para la elaboración de nuestra BD así como la organización de la misma. Las explicaciones vendrán acompañadas de algunos ejemplos que servirán de iniciación al estudio y que facilitarán la lectura del análisis que realizaremos en los capítulos posteriores. Con el Capítulo 4, el último capítulo, se divide en tres grandes apartados, en la primera parte, hemos realizado un listado de equivalencias, en los tres idiomas. Gracias a éste, nos hemos visto confrontados a las dificultades ligadas a la elección de equivalentes en la lengua meta. Hemos seleccionado por apoyarnos en el Refranero Multilingüe (RM), disponible online, con el fin de tener una perspectiva más amplia de las posibles variantes, y más abundante de las equivalencias propuestas para cada refrán. Sin embargo, uno de los obstáculos más difíciles en el estudio de las unidades paremiológicas es el de encontrar una justa equivalencia o por lo menos una traducción adecuada para las combinaciones fijas de palabras, como los dichos, las frases hechas y los refranes. Para poder superar esa dificultad, un paso previo ha de ser el conocimiento exacto y preciso del significado del dicho, de la frase hecha o del refrán que se ha de traducir. En la segunda parte de este capítulo, hemos procedido a una clasificación, en tres grupos, en los que figuran equivalentes simétricos; equivalentes casi simétricos y equivalentes totalmente diferentes. Por otro lado, veremos también los parasinónimos que están presentes en la BD con el número correspondiente para que puedan ser localizados. Al realizar nuestras equivalencias, encontramos a veces una idéntica correspondencia entre las tres lenguas o entre dos de ellas, o encontramos cambio de algunas palabras y estructuras gramaticales, pero con similar significado. Nos vamos a centrar en la clasificación de los refranes españoles y sus equivalentes franceses y árabes, y veremos que, siendo lenguas relativamente alejadas, el caso del español-árabe, y francés árabe, aún así, presentan gran semejanza en los refranes. A partir de todo lo expuesto, nos preguntamos: – ¿Cómo se explica esta similitud entre estas tres culturas? – ¿Cuáles son las causas de este intercambio social, intercultural y semántico? En la tercera parte, llevaremos a cabo los problemas de traducción encontrados a causa de la carencia de los diccionarios paremiológicos. Pues, resulta que el tratamiento de los refranes en los diccionarios monolingües y bilingües es relativamente limitado, sobre todo, árabe – español y viceversa planteando grandes problemas para su comprensión y su traducción. Posteriormente, ofreceremos algunas técnicas traductológicas para la búsqueda de correspondencias paremiológicas. Finalmente, por medio de una encuesta realizada en España, Francia y Argelia, se entrevistó a sesenta personas, veinte para cada país, de todas las clases sociales, hombres y mujeres, de diferentes niveles de estudios, y de diversos puntos geográficos del país, incluyendo centros urbanos y rurales. Nuestra encuesta no se limitó solamente en un grupo de campesinos o de ancianos, pues, también se ha entrevistado a los capitalinos con el objetivo de corroborar la familiaridad de la gente con los refranes. Hay que aceptar que es un proyecto muy ambicioso pero que se puede llevar a cabo tomando una muestra significativa de individuos que provengan de los diferentes ámbitos de estos países. Nuestra intención es poder demostrar que la mayoría de las personas emplean los refranes como parte fundamental de la comunicación, sin dar mucha importancia a su clase social o su nivel de estudios. Es verdad que las personas que viven en las zonas como los campos y los pueblos tienen la tendencia a emplear más a los refranes que las personas que viven en las ciudades. Sin embargo, en nuestra encuesta, esta característica, el uso de refranes, no es exclusiva de un grupo u otro, se limita a descubrir hasta qué punto o en qué grado estas tres sociedades están interesados en el uso de los refranes. Por eso, es muy importante entrevistar a personas que cuenten con un nivel de estudios avanzado. También hemos entrevistado a personas que no cuenten con estudios avanzados y que estén más expuestos a la vida campesina y a la agricultura para saber si estas particularidades son una de los motivos por la cual los refranes son más empleados por las personas que viven en las zonas rurales. CONCLUSIÓN: Como resultado de nuestro trabajo de investigación se aprecian, entre otros aspectos que para nosotros resultan relevantes, los siguientes: Desde los tiempos remotos, los intelectuales prestaron mucha atención a los estudios paremiológicos, en general, y a los refranes, en particular. Pues, han sido objeto de interés por parte de los investigadores, a lo largo de la historia humana. Dicho interés por la recopilación de las paremias se debe al valor y a la necesidad de conservar y proteger las experiencias y las costumbres de la vida humana sobre las relaciones familiares y laborales. Al plantear la historia de las paremiologías española, árabe y francesa, hemos considerado que la historia de la paremiología de las tres lenguas es muy rica, se califica por una creación profunda y apasionada, puesto que desde la recopilación de los Refranes temáticos que dicen las viejas tras el fuego (1508) del Marqués de Santillana hasta Refranero temático (2005) de José Luis González, se han editado un número considerable de recopilaciones paremiológicas que superan mucho las producciones paremiológicas de todos los países árabes. A través de búsqueda de equivalencias de la lengua española a las lenguas francesa y árabe, hemos observado que existe un marco de encuentro entres las tres culturas. Ya que los refranes indican una verdad o una moraleja ante una situación precisa, sería lógico que se exista un punto común entre los refraneros de las tres culturas. Sevilla Muñoz, (2006: 944) explica que “La comparación del inventario paremiológico de dos sociedades próximas geográficamente, como la francesa y la española, nos ha permitido comparar su esencia como pueblos, sus rasgos comunes y sus características diferenciadoras, sus grados de lejanía o proximidad como pueblos. Al mismo tiempo, ha puesto de manifiesto la indudable relación existente entre las paremias empleadas por una sociedad y su historia, su cultura, sus costumbres; las paremias parten de ellas, se apropian de los rasgos esenciales y primarios de una sociedad y los reflejan en unas unidades lingüísticas breves. Las paremias constituyen una excelente fuente etnolingüística que ha traspasado las fronteras del espacio y del tiempo para llegar hasta hoy día con toda su frescura. Con este trabajo, hemos tratado de mostrar la utilidad que conlleva aunar el enfoque etnolingüístico y el lingüístico-comparado y traductológico, si deseamos emprender su búsqueda de modo fructífero y aprehender mejor el contenido de las paremias, no sólo las “enseñanzas aplicables a cualquier situación dela vida cotidiana sino también la descripción de la sociedad que las vio nacer, una sociedad eminentemente rural” (Sevilla y Cantera, 2002: 19). El refranero popular es una forma privilegiada para entender mejor que de ninguna otra forma, el modo de la vida y de la cultura que lo difunde. A pesar de todo lo dicho, hemos percibido, al estudiar los refranes españoles y compararlos con los refranes franceses y árabes, que existen diferentes grados de correspondencia de significado en los tres idiomas, y esto, a pesar de la lejanía de formas culturales. En definitiva, tras nuestra clasificación podemos añadir lo siguiente: • Como existen semejanzas entre los tres idiomas, existe también un trasvase de ideas y conceptos entre el español, el árabe y el francés • La proximidad geográfica existente entre España y Francia y los países árabes del Maghreb influye de manera determinada en los resultados obtenidos • La influencia del árabe del Al-Ándalus contribuye en la lengua española • La lengua española y la lengua francesa son muy cercanas lingüísticamente y geográficamente • La lengua árabe no es tan cercana del español y del francés si la comparamos con la similitud que existe entre estas dos otras lenguas Las paremias plantean problemas peculiares en su traducción. El análisis comparado de las mismas nos ha permitido comprobar la dificultad de la traducción de las paremias. A través de este estudio hemos intentado ofrecer a los traductores un contraste del que podrán beneficiarse, pues son ellos quienes cumplen con la noble misión de acercar unas culturas a otras, mediante la difícil pero apasionante tarea de expresar en una lengua todos los misterios que encierra otra, y que es mucho más que cambiar formas verbales: es establecer contactos entre tres realidades o culturas, el español, el francés y el árabe. En resumen, podemos decir que no es fácil seguir una única metodología para el análisis de las equivalencias de las paremiologías españolas, francesas y árabes, ni literal, ni conceptual. Hay que considerar que para una buena traducción, el lector debe sentir que el texto traducido que está leyendo es como si hubiera sido originario en la lengua meta, y para que el lector logre este nivel de perfeccionamiento en la traducción es fundamental ser trilingüe y ser tricultural. En nuestra tesis sería indispensable que el lector fuera tricultural, porque el español, el árabe y el francés son tres idiomas pertenecientes a tres familias lingüísticas diferentes, aunque el español y el francés son muy parecidos y no son tan diferentes en cuanto a la cultura y las corrientes ideológicas, mientras que traducir del español o del francés al árabe es completamente distinto porque existen muchas diferencias culturales entre el español, el francés y el árabe, éstas diferencias obstaculizan la función de la traducción e interpretación de los refranes, ya que éstos reflectan sus relativas culturas. Es por ello que al traducir un material textual, en nuestro caso los refranes, es necesario seguir métodos adecuados que nos permitirían llevar al equivalente más adyacente en la lengua meta. No cabe lugar a dudas de que hay un nexo único entre la cultura y el idioma. De este modo, podemos afirmar que a mayor influencia, menor dificultad en la traducción, puesto que los enunciados desconocidos se hacen comunes por medio de esta influencia. Esta es, conforme a nuestra manera de ver, la razón por la que es mucho más fácil traducir el español y el francés al árabe que a la inversa del árabe al español o al francés. No obstante, el conocimiento de las culturas es imprescindible para una traducción adecuada de una lengua a otra. Por lo tanto, a la hora de realizar una tesis como la nuestra, es fundamental, conocer el tema que se está traduciendo, es decir que, es importante conocer y comprender tanto la cultura de la lengua original como la cultura de la lengua receptora. Por tanto y para una buena traducción de las paremias, en general, y de los refranes, en particular, el traductor debe tratar encontrar la mejor solución de entre las varias soluciones posibles: - Debe poseer la suficiente competencia lingüística que le permita identificarlos en la LO, comprender su sentido y buscar su correspondencia en la LT. - Debe tener en cuenta, que la equivalencia paremiológica no es la traducción palabra por palabra. Al contrario, se trata de buscar en la LT un enunciado que coincida lo máximo posible con la paremia de la LO. - Debe analizar bien el enunciado en la LO y dejarse llevar por su buen sentido, que le ayudará a optar por el equivalente más apropiado en la LT. Cada pueblo tiene su patrimonio cultural, aún así, el área cultural occidental, caso del español y del francés, presenta aspectos similares debido a sus tradiciones y a su desarrollo, más aún cuando se trata de dos lenguas de origen latino: Si quieres buenos nabos, en julio has de sembrarlos → Qui veut bon navet, le sème en juillet = (Quien quiera buen nabo, lo siembre en julio) Si los refranes aparecen en un texto que hayamos de traducir, es imprescindible conocer el significado exacto de los refranes para poder dar con la correspondencia en la otra lengua o por lo menos para tratar de acertar en su traducción. Eso supone una formación lingüística muy profunda de las tres lenguas y al mismo tiempo un conocimiento amplio de las tres civilizaciones. Como no somos ni podemos ser enciclopedias podrá ocurrir y de hecho ocurrirá en más de una ocasión que nos encontramos con algunos refranes cuyo significado exacto nos resulte desconocido. Para eso están los diccionarios. Pero debemos tener información suficiente de la bibliografía con la que podamos completar nuestra falta de conocimiento y aclarar nuestras dudas. Y también será muy conveniente y hasta necesario tener además una habilidad o un arte especial para acertar a reflejar en la lengua a la que traducimos no sólo el significado sino también la expresividad. En cuanto a los diccionarios, se ha detectado un índice elevado de carencia cualitativa y, en algunos casos, cuantitativo. Desde el punto de vista del traductor, ambas son importantes. Parece evidente que cuánto más información contenga una obra de referencia, más posibilidades tendrá de servir apoyo al traductor. Sin embargo, este factor por sí sólo no tiene ningún sentido, pues ¿de qué sirve tener mucha información si carece de calidad? Es por ello que para que un diccionario tenga éxito debe cumplir unos requisitos: ser extenso en cantidad de entradas a condición de que esas entradas ofrezcan la información exhaustiva y detallada que el traductor necesita. Tendríamos que exigir decididamente que nos devuelvan los refranes a los diccionarios, porque la lengua sin ellos es un producto artificial. Sin embargo, con este trabajo hemos logrado determinar la existencia de posibles clasificaciones sintácticas de las paremias y la importancia de esta rama que, como decíamos en un comienzo, a veces parece estar algo olvidada.