Memoria y desmemoria, pensamiento y poética en la dramaturgia de Juan Mayorga
- Josep Lluís Sirera Turó Directeur/trice
- Evangelina Rodríguez Cuadros Directeur/trice
Université de défendre: Universitat de València
Fecha de defensa: 18 décembre 2014
- Manuel Reyes-Mate Rupérez President
- Eduardo Pérez-Rasilla Bayo Secrétaire
- Enrico Di Pastena Rapporteur
Type: Thèses
Résumé
En Memoria y desmemoria, pensamiento y poética en la dramaturgia de Juan Mayorga nos hemos adentrado en los puntos de contacto entre filosofía y teatro para, a partir de ahí, ver cómo éstos son permeables. Nuestra investigación se ha interesado en el diálogo, en la intertextualidad, en ver cómo las piezas dramáticas de Juan Mayorga se relacionan unas con otras y desestabilizan, sobre todo, aquello que creemos saber. Si de la palabra teatral del autor nos interesa la desconfianza hacia el lenguaje –asunto compartido por otros dramaturgos de su generación?, más interesante nos resulta la fe que en él vuelca. Prueba de ello es su reescritura, la búsqueda constante de una palabra precisa con la intención de trasladarnos, de hacernos ver, que hay otro lado de las cosas. Su escritura nos lleva a unos gestos que configuran una poética en exceso con la que el dramaturgo hilvana sus zozobras, sus preocupaciones, pero también su mirada por lo que a un teatro de la memoria se refiere. De este modo, nos hemos apoyado, fundamentalmente, en el pensamiento de Walter Benjamin, el de Reyes Mate, el de Giorgio Agamben, Ricardo Forster, Didi-Huberman, Massimo Cacciari, María Zambrano, Albert Camus, Fernando Bárcena, Eduardo Pérez-Rasilla, Mabel Brizuela, Adriana Musitano, Marina Garcés… Principalmente, hemos prestado atención a seis piezas teatrales que pueden enmarcarse dentro del periodo de consolidación del dramaturgo: Himmelweg, Animales nocturnos, Últimas palabras de Copito de Nieve, La tortuga de Darwin, La paz perpetua y El cartógrafo. No obstante, a partir de ahí hemos notado cómo algunas de sus temáticas ya habían sido abordadas en textos anteriores. Asimismo, hemos dividido la tesis en tres partes. La primera de ellas se compone de un capítulo que lleva por título “Himmelweg: tragedia y traducción”. En éste hemos desarrollado toda una serie de puntos que, en cierto modo, se despliegan a lo largo de toda la investigación. Partimos del proceso de creación de la pieza teatral para pasar a los postulados de Primo Levi alrededor de la “zona gris”, pero también para adentrarnos en la idea de traducción concebida por Walter Benjamin, o entre otras, a las posibilidades de actualización de lo trágico en el teatro contemporáneo. La segunda parte abarca cuatro capítulos, en este caso, a partir de Animales nocturnos, Últimas palabras de Copito de Nieve, La tortuga de Darwin y La paz perpetua. Esta parte está dedicada a “animales” de Juan Mayorga. De este modo, el segundo capítulo se titula “Animales nocturnos: ley y exilio”. En él hemos prestado atención al concepto de ciudadano, es decir, quién -y quién no- puede ser llamado así. Además, nos hemos preguntado si puede decirse que hemos salido -o no- de Auschwitz. Tal asunto nos ha llevado a indagar alrededor de la noción de extranjero. Nos hemos centrado en el leitmotiv de la pieza y, sobre todo, en las líneas de fuga que plantea el personaje de Mujer Alta. El tercer capítulo lleva por título “Últimas palabras de Copito de Nieve: defensa de la finitud”. Este punto nos ha llevado a detenernos en nociones como las de la identidad. Pero también en las pasiones, nos referimos a las desarrolladas por el pintor Charles Le Brun. Sin embargo, el interés principal del capítulo reside en la lectura que Juan Mayorga hace de Michel de Montaigne. En el cuarto capítulo, “La tortuga de Darwin: la memoria como camino”, hemos prestado gran atención a la figura del Angelus Novus, pero también a la violencia, al artificio y a la resistencia que presenta el personaje de Harriet. Asimismo, hemos articulado un discurso que pretende hilvanar las relaciones entre la mirada del animal, del ángel y del infante. La intención es la hablar acerca de la tarea del historiador (dramaturgo-historiador). Hablar de esperanza. El último capítulo de esta parte corresponde a “La paz perpetua: reflexión y utopía”. Ahora, con tal de examinar la intensidad de lo político, nos hemos acercado al binomio amigo-enemigo. Por ello, a su vez, hemos reflexionado sobre qué se entiende por paz y qué por guerra. Nos hemos centrado en abordar tanto la imagen de mónada como la idea de metáfora nitzscheana con tal de adentrarnos en el pensamiento que Kant desarrolla en su La paz perpetua. La tercera parte, como la primera, se compone de un único capítulo, en este caso, “El cartógrafo. Varsovia, 1: 400.000: paseo por la ausencia”. Aquí hablamos de cómo el andar puede presentarse como una idea para pensar la historia. En todo caso, hemos partido del proceso por el que el dramaturgo concibe la pieza teatral antes citada. Remitimos a los postulados de Michel de Certeau, pero también, entre otros, a los de Paul Ricoeur o Marc Augé. Hemos prestado especial interés a la evolución de los mapas y la figura matemática de la elipse, de las que nos hemos servido para leer su idea de teatro y, sobre todo, su teatro histórico. Hemos observado los vínculos entre la ciudad y el nosotros, y la memoria, como arma contra la barbarie. De importancia es la mirada hacia el coleccionista benjaminiano como base para la escritura teatral y el pensamiento de Juan Mayorga. Finalmente, hemos indagado en la imagen rizomática desarrollada por Deleuze y Guattari por la que el dramaturgo se sirve tanto para escribir su teatro como mapa como para, en todo caso, pensarlo como un atlas siempre a completar. A lo largo de la tesis hemos prestado atención al conflicto entre los personajes, a aquello, podríamos decir, que puede acontecer en ellos. Asimismo, nos hemos preguntado si sus voces pertenecerían a un mismo universo, en todo caso, enmarañado por la memoria.